martes, 22 de septiembre de 2009

Popurrí

Un par de cosillas que por sí solas no merecen una entrada propia:

-Hoy fui al médico, y como siempre, entré pensando...: 'Venga, nada de llorar, cacho de carne'. Y como siempre, fue un epic fail.
Pero bueno, más allá de ésto, la doctora ('médica' me suena bastante mal xD) me dio buenas noticias. Lo curioso es que no me sentí aliviada. Es decir... sé que fuí irresponsable, y auque éste 'capítulo' haya acabado, voy a recordar siempre que escurrí el bulto. Y claro, ¿cómo me quito yo ésto ahora de encima? Jodido, amigos.

-Siempre, no sé por qué, acabo involucrada en algún asunto de responsabilidad en la clase. El primer año reconozco que me lo busqué, y me presenté a delegada. El año pasado NO me presenté, pero para mi emputamiento personal salí elegida. Coherente, ¿eh?. El año pasado, además, me esforcé en ser lo más 'light' posible en mis tareas, tal y como dije que sería el día en que me eligieron sin yo haberme presentado. No me encargaría de la llave, de éso que se encargara el subdelegado, no me encargaría de la lista, y no me importaría un pincho moruno los temas a debatir en tutoría. Espero que con eso se les haya quitado la bobería.

Aún así, mi nuevo tutor, va, y antes de dejar la clase (también me da biología), y me deja a cargo de la llave del aula, que debo recoger a las ocho menos cinco (¡cuando de todos es sabido que yo llego al instituto por lo pelos!), cerrar el aula antes del recreo y abrirla después, y entregar la llave a las dos menos cuarto; a la par que confirmar que cada profesor que nos dé clase firme en una hojita hasta que se habiliten los tamagochis esos que tienen.
¡¡¿Es que tengo cara de llavero?!! ¡¡Con la de gente que podría encargarse de ésto en mi clase!! no, va y me coge a mí, que solo me conoce de dos días de clase y una tutoría.

La verdad es que a éstas alturas no sé si alegrarme porque parece ser que transmito a la gente un aura de responsabilidad en la que confían, o enfadarme por ser la primera prima en la que piensan en encasquetar responsabilidades; con lo que me gusta a mí ir a mi aire. Leches.

(Tal vez sea una de esos misterios sin resolver, como el de por qué es a mí siempre a la que preguntan por dónde se va a tal o cual sitio, por qué siempre piensan que tengo más edad de la que realmente tengo, y por qué carajos soy la única que ésta en casa cuando suena el teléfono...)

~¡A cuiarse!

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